Comunicación oficial de huelga
El pueblo palestino está siendo exterminado. Tras dos años de genocidio, el gobierno sionista de Netanyahu persiste en sus planes criminales. Más de 60.000 palestinos han sido asesinados, 18.000 de ellos niños y niñas, y la hambruna organizada como arma de guerra afecta ya al 25% de la población. Los hospitales, las escuelas y las viviendas han sido reducidos a escombros. Gaza se ha convertido en una fosa común a cielo abierto.
Estamos ante una limpieza étnica inhumana, diseñada por un régimen fanático y fascista que está actuando igual que hicieron los nazis contra la comunidad judía. La gran mayoría de nosotros hemos estudiado el Holocausto y las cámaras de gas. Con la “solución final” sionista contra el pueblo palestino la historia se repite.
Netanyahu no está solo. Cuenta con todos los recursos económicos y militares del imperialismo norteamericano y del gobierno de Donald Trump, y el apoyo entusiasta de toda la extrema derecha internacional. Eso incluye a Vox y el PP, que no esconden su respaldo a Israel, ni su islamofobia y su odio racista contra la comunidad inmigrante.
El sionismo asesino puede hacer lo que hace gracias al gobierno de Trump, pero también gracias a la complicidad de la Unión Europea y sus Gobiernos que, mientras nos hablan de “democracia”, siguen vendiendo armamento y haciendo negocios con el régimen de Netanyahu.
En el caso del Estado español, el gobierno del PSOE-Sumar está utilizando un doble lenguaje. Si Pedro Sánchez considera que lo que está ocurriendo en Palestina es inaceptable, ¿por qué no rompe inmediatamente relaciones comerciales, diplomáticas y militares con Israel acordando un embargo de armas total? No hay espacio para los discursos vacíos cuando un pueblo está siendo masacrado ante nuestros ojos.

